Mario es un niño moreno de piel tostada. Su pelo es negro como el carbón y tiene una debilidad: ¡LE ENCANTA EL CHOCOLATE!.
Le gusta tomar leche con varias cucharadas de cacao a cualquier hora del día.
Y se pirra por la Nocilla así que cuando mamá no le ve mete el dedo en el bote, sabiendo que si lo pilla le caerá una buena. Por todo esto todos sus amigos le llaman MARIO CHOCOLATE.
La otra tarde mientras tomaba un tazón de chocolate con leche se dio cuenta de que en el bote ponía la palabra cacao y claro como iba despacio, muy despacio leía caca… ca…. caca… cacao. ¿Qué sería aquello? Y le fue a preguntar su madre.
¡Qué nervios! ¿Sería un árbol, una flor, una patata? Mamá buscó en la estantería, sacó un precioso libro y le contó lo que ponía. Era una historia que Mario Chocolate jamás olvidaría LA HISTORIA DEL CACAO
GRACIAS Quetzalcóatl
YO TAMBIÉN
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